domingo, 16 de octubre de 2011
martes, 11 de octubre de 2011
lunes, 10 de octubre de 2011
Discriminación como acto naturalizado
Sara Amelia Espinosa Islas
Programa Universirtario de Derechos Humanos
Sin duda , la discriminación es uno de los problemas más graves que vivimos en la sociedad mexicana. Es común escuchar frases despectivas que a nadie le parecen graves, o peor aún, dan por sentado que ese compartamiento es normal e incluso justo y compartido como normal por toda la población.
Un ejemplo fuerte y contundente es la actitud de alguienque le incomoda la presencia, color de piel, habla, apariencia física, forma de vestir o expresión de una persona, simplemente dirá: “es bien naco”; “es tan naca”. Otra expresión típica: ” es bien indio”; “parece que lo bajaron del cerro a tamborazos”.
Lo curioso es cuando alguien osa en señalar la carga de discriminación y xenofobia de estas expresiones, la parte que emite el lenguaje con prejuicio debatirá la normalidad de su expresión, se avalará en que la mayoría de la población piensa igual y es más, reclamará su derecho a discriminar como algo que nadie le puede impedir, porque desde perspectiva, su lenguaje no discrimina.
La discriminación es un gran problema que se vive en nuestra sociedad. Esto se debe a estereotipos, publicidad y manejo de los medios de comunicación. Simplemente, pensemos en el éxito y aceptación de personajes como “las Lavanderas”, “el Vitor” y “las Nacarandas” (sólo por mencionar algunos ejemplos), quienes refuerzan una serie de estereotipos y naturalizan la discriminación.
Otro aspecto que resalta la discriminación, es la forma en que las y los mexicanos nos percibimos respecto a nuestro color de piel y aspecto físico. Dato curioso, partiendo de la idea que la mayoría de los habitantes del país somos personas mestizas y morenas.
Mi comentario tiene que ver con la precocupación que me ocasinó al conocer los resultados de un estudio realizado por el Consejo Nacional para prevenir la Discriminación (CONAPRED). Entre sus resultados se encontró que a las mexicanas no les gusta ser morenas, por lo que suelen catalogarse así mismas con una tez más clara, es decir, “morenas claras”, “apiñonadas” o “morenas casi blancas”.
Por otro lado, el 28% de los mexicanos aseguró que ha recibido un trato desigual sólo por ser de un tono de piel distinto al establecido por los estándares sociales.
Gracias a los estereotipos, en México existen muchos obstáculos laborales debido al color de piel, como si una persona de tez blanca tuviera más capacidad que una persona de tez morena para realizar actividades.
La publicidad es una de las causantes de la problemática, debio a que los medios venden la idea que la mujer es bella o el hombre es guapo si es rubio. Raramente vemos en la publicidad a personas morenas.
En algunas ocasiones suele representarse en los spots publicitarios a las personas de tez morena y tomaré el ejemplo de los promocionales de la SEDESOL. En todos sus spot de televisión e imagenes impresas se representa y posiciona a las personas morenas como pobres y beneficiarias de los programas gubernamentales. Al menos hasta hoy, jamás he visto un solo spot o imagen en que aparezca una persona de tez blanca en la situación antes descrita.
Creo que el fondo de este problema es la mentalidad autoracista que existe (y que no es nueva) en México, la cual se agudiza y crece con la mercadotecnía y la llamada cultura global.
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